Ricardo Tejada, gerente general de la Asociación Nacional de Armadores de Chile.
El Congreso de Chile recientemente aprobó en forma general la iniciativa que modifica el artículo 3° del decreto ley N° 3.059, de 1979, con el fin de autorizar el cabotaje de pasajeros a cruceros de bandera extranjera.
De acuerdo a la moción, se permitirá la realización de esta actividad sólo a barcos de hasta 400 pasajeros, en caso de que no haya disponibilidad de cabotaje en barcos de bandera nacional, y previa autorización de la autoridad competente, limitantes que fueron consideradas con el fin de proteger a la industria nacional.
Al respecto, Ricardo Tejada, gerente general de la Asociación Nacional de Armadores (ANA), señala que la propuesta en trámite en el Congreso “a nosotros no nos afecta directamente”, pero aclara que “podría afectarnos el día de mañana si queremos tener buques de pasajeros más grandes”.
Tejada explica que si a futuro una naviera chilena ingresa al negocio de cabotaje de pasajeros quedará en desventaja, respecto a los extranjeros, ya que estos no tributan en Chile. “Una bandera de conveniencia paga impuestos bajísimos, la dotación extranjera es un 30% más barata que la chilena”, señala y plantea la interrogante de qué se va hacer cuando una línea nacional desee participar en el negocio- “¿vamos a cambiar la ley de nuevo?”- cuestiona. Ante este dilema, propone la implementación de “un sistema de waiver o reputaciones de naves, que es un método para ver las excepciones”.
Por otro lado, pese a estar de acuerdo con que exista el cabotaje de personas con naves extranjeras si no hay buques de bandera nacional disponibles, duda de la factibilidad del negocio: “No sé si va a haber la demanda de pasajeros o turistas que deseen hacer la ruta Arica- Valparaíso, Arica- Punta Arenas”, tramos que podrían ser creados una vez que la moción se convierta en ley.
Cabotaje de carga
Tejada señala que en el caso que la moción sea implementada, vendrán a trabajar a Chile empresarios extranjeros con leyes extranjeras y que estarán pagando impuestos a otro país. Por ello manifestó su oposición a que esta posibilidad se extienda al cabotaje de carga: “O sea nosotros estamos dispuestos que haya oferta y competencia que satisfaga la demanda que pudiera haber, pero en igualdad de condiciones. Vale decir, igualdad de condiciones laborales, legales, de dotaciones comerciales, etc…”.
En este sentido recalcó que “la función del Estado de Chile es fomentar la Marina Mercante Nacional, no desincentivar la posibilidad de que existan buques con bandera nacional”.
El gerente general de la ANA plantea sus dudas en cuanto a la posibilidad de que las nuevas naves de pasajeros, permeando la normativa, incluyan en la práctica el servicio de carga: “Qué pasa si después- en un buque autorizado para el traslado de pasajeros- se dice ‘voy a llevar 10 contenedores”. En ese caso el ejecutivo señala que la oposición de la ANA sería inmediata. “Si es para pasajeros, es para pasajeros, si se meten en otro cabotaje, sería cabotaje de carga, contenedores sólidos, líquidos, etc…”, lo que no están dispuesto a aceptar.
Ricardo Tejada sostiene que desde hace un año el gremio se encuentra trabajando con la Armada de Chile y el Ministerio de Transporte acerca del cabotaje de graneles sólidos, líquidos y carga y detalla que siempre hubo algunas posturas del Ministerio con las que no estuvieron de acuerdo. Una de ellas-explica- era cambiar el concepto de cabotaje, pero apunta que “el concepto del cabotaje es uno solo en todo el mundo. Además, no aceptamos algunas condiciones que desfavorecían a algunos buques con bandera chilena”.
El ejecutivo destaca que “Chile tiene una tradición naviera. Además la Marina Mercante Nacional va cumplir 200 años”… y se opone a quienes desean que el país abra al cabotaje de carga, idea que considera un error, ejemplificando con el caso de “Argentina que abrió el cabotaje, pero que ahora lo está cerrando, o el de EE.UU. donde es totalmente cerrado, o el Europa que permite los transbordos de carga, pero sólo dentro de los países comunitarios”.
Finalmente al referirse a la moción respecto al cabotaje de personas, que está a punto de concluir su tramitación en el Congreso, Ricardo tejada sostiene que “hay que mirarla con cuidado o sea no puede llegar y abrirse, porque si se abre ahora y si en algún momento un naviero chileno quiere poner un buque chileno va ir en desventaja”, por lo que reiteró la necesidad de que la normativa contemple “excepciones”.
“Si no hay un buque chileno que lo haga en este momento, perfecto que lo haga un buque extranjero por ruta, con licitación y con una reputación de empresas de naves chilenas”, insistió.
Fuente: MundoMarítimo